El Valor Creciente de la Integridad en las Comunicaciones de Mercadotecnia B2B

En tiempos más sencillos era relativamente fácil comprender un fraude. La vida era más simple; todo era más transparente.

Las tecnologías digitales generalizadas actuales posibilitan que cualquier estudiante de secundaria manipule con destreza y virtualmente todo lo que vemos, oímos y leemos. Las imágenes “de fotoshop” se han convertido en algo de rigor. La edición de video y audio ha alcanzado un nivel nuevo de normalidad.  Como comunidad, hemos avanzado desde la advertencia de Benjamin Franklin ("No creas nada de lo oigas y la mitad de lo que veas") hasta ahora en que no tenemos fe en NADA. Incluso nuestras fuentes nuevas ceden ante la capacidad de manipular la realidad, como fuera confirmado en una serie de acusaciones contra MSNBC.

Dado nuestras capacidades crecientes de manipular salvajemente las realidades (ya sean audio, video, imágenes instantáneas o escritos) Y nuestra desconfianza creciente en virtualmente NINGUNA fuente de información, arribamos a una nueva condición importante. Existe ahora un mayor valor puesto en la virtud y la integridad.

Como practicantes de Marcom B2B, nos corresponde saber que ganarse la confianza es una tarea larga y dura. Y, todas nuestras ganancias pueden perderse con una indiscreción.

Cuando todo puede ser falso, y cuando la credibilidad es escasa, es más importante que nunca cultivar una cultura de integridad.

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