Otra razón subyacente por la que los robots y la inteligencia artificial no se quedarán con la mayoría de trabajos
Amigos,
Pensé que debería tomarme un descanso de la serie “Soldadura 101”…
Cuando los telares mecanizados proliferaron en Inglaterra y los estados de Nueva Inglaterra a principios del siglo XIX, muchos predijeron una tremenda pérdida de trabajos. Ciertamente muchos tejedores manuales perdieron sus trabajos, lo que causó una interrupción laboral temporal. Sin embargo, el efecto general fue positivo. Antes de los telares mecanizados, la ropa era tan cara que la mayoría de las personas solo tenía unas pocas prendas de vestir. Para finales del siglo XIX, puesto que el precio de la ropa se desplomó, para inicios de la centuria la mayoría de las personas poseía un guardarropas mucho más grande. De ahí que, en promedio, el estándar de vida se incrementó dramáticamente para la mayoría de las personas.
Incluso se puede contar una historia aun más fuerte sobre la agricultura. En el siglo XVIII, más del 50% de la población de los Estados Unidos se dedicaba a la agricultura, en la actualidad, la cantidad es menor que el 2%.
La mayoría de nosotros solo comprará cierta cantidad de prendas de vestir y solo comemos cierta cantidad de comida, de manera que la automatización acabó con muchos de esos puestos laborales, pero el advenimiento de la tecnología también creó nuevas industrias y trabajos. Tales industrias no poseen un límite superior en cuanto a la cantidad de demanda que existirá para sus productos. Un artículo reciente del Wall Street Journal planteó ese tópico.
Considere nuestra industria: La electrónica. En 1935, esencialmente solo existía un solo producto, la radio. Para la década de 1950, surgieron los televisores, luego las radios portátiles, las VCR, las cámaras digitales, los PC, los DVD, los teléfonos móviles, los teléfonos inteligentes, etc. No existe límite para los productos que la tecnología creará. Es cierto que los robots y la automatización desempeñarán muchos de los trabajos que se requerirán para producir tales productos, pero siempre se requerirá que los humanos gestionen y reparen a dicha servidumbre de manufactura. Adicionalmente, los robots aun carecen de la capacidad para realizar muchas labores que son simples para los humanos. Steven Pinker, en su nuevo libro, Enlightenment Now, (Iluminación Ahora), señala que ningún robot con inteligencia artificial puede desocupar una lavadora de platos. Los robots pueden realizar las tareas repetitivas para las que se diseñaron y programaron. Sin embargo, se desempeñan deficientemente en muchas labores que son fáciles para los humanos. Además de no tener la capacidad de desocupar una lavadora de platos, hacer una cama o ensamblar objetos simples pero diferentes, sería un desafío para los robots.
Nuestra industria, el ensamble de dispositivos electrónicos, no solo es crítica para la fabricación de tales productos tecnológicos, sino que también lo es para los robots y para la inteligencia artificial misma. Así que en vez de una amenaza, percibo tiempos emocionantes por venir.
Saludos
Dr. Ron
Connect with Indium.
Read our latest posts!